El Ayuntamiento de Plasencia ha descubierto ayer lunes un azulejo de grandes dimensiones en homenaje al grupo de mujeres que en septiembre de 1898 acudieron al socorro de "unos 400 soldados" que llegaron a la ciudad en un tren militar procedentes de la guerra de Cuba y que motivó la concesión a la ciudad del título de "Muy benéfica".
Dicha placa ha sido impulsada por la nieta de una de las mujeres, Josefa Platero, ya que en el recuerdo de los placentinos queda la figura de 'Isabel La Cabrera', pero fue un grupo "de 12 mujeres que al enterarse que venía el tren se organizaron para llevar una cántara de agua", cuenta Josefa Platero, que le relató su abuela y su madre, pero "claro, con esa cántara no llegaba el agua ni para un cuarto de los soldados".
Es por ello que las mujeres "se volvieron a reunir y se dividieron las tareas", la "más dura era la de ir a pedir dinero a los ricos", según Platero, pero la ciudad se volcó, además de añadir que en casa de su abuela había un cuarto donde se guardaban las galletas y las cosas que daban para ir repartiéndolas luego a los soldados.
Una acción la de estas mujeres que se suspendió "cuando llegó la Cruz Roja y ellas ya se dedicaron a acompañar a los soldados".
Es por ello, que el placa descubierta este lunes se leen los nombres de 'Isabel la Cabrera', la más conocida, pero también el de 'Dionisia La mana', Eduarda Bordallo, Isabel Moreno, Leonor Conejero, Leonarda Melo, Leandra Rovira, Maria Cano, María Gómez, Rafaela Calderón, Sandalia Pérez y Victoria Adamo.
El alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, ha destacado que este año se cumple "120 años de aquella acción" y que con este acto se quiere reconocer a estas mujeres que "no sólo lo hicieron por solidaridad, que también, sino en recuerdo de muchos familiares suyos que también estuvieron en la Guerra de Cuba pero que no pudieron volver.
"Por ello, ellas hicieron con los que no conocen lo que habrían hecho con los que conocían y querían", ha apuntado Pizarro, quien ha resaltado que esas mujeres sirvieron de "ejemplo" para que "toda la ciudad se uniera", ya que en muchos otros puntos no quisieron atender a los soldado por el miedo a que fueran portadores de enfermedades tropicales y provocaran "una epidemia".
Una acción, ha expuesto, que permitió que la ciudad tenga uno de los títulos mas bonitos como es el de Muy Benéfico, Muy Solidaria sería hoy en día", y que comparte "con muy pocas ciudades en España".
