Tras las demandas de algunos alcaldes, el diputado de Medio Ambiente y Transición Ecológica se reúne con los municipios para ofrecer esta herramienta que abarata costes económicos, humanos y técnicos a los ayuntamientos.
El vicepresidente segundo de la Diputación de Cáceres y diputado de Medio Ambiente y Transición Ecológica, Alfonso Beltrán, se ha reunido este martes en Logrosán con representantes de los municipios de la zona para ofrecer la gestión de las estaciones depuradoras de aguas residuales por parte de la Diputación, ayudando así en esta tarea, tanto económica como técnicamente a los ayuntamientos, sobre todo a los más pequeños.
Para ello, la propuesta, hasta que comience a funcionar de nuevo el Consorcio Medio XXI, es llevar a cabo la firma de un convenio unilateral con los municipios que así lo deseen, por el que “desde la Diputación -ha explicado Beltrán- se llevaría la gestión técnica hasta que, más adelante, se sacara la licitación, por lo que el ayuntamiento no se tendría que preocupar de nada”.
Esta de Logrosán ha sido la primera reunión de una serie que se va a mantener a lo largo de la semana hasta cubrir el territorio provincial, por lo que el miércoles se prevé la reunión, en Malpartida de Plasencia, con los municipios de la zona; el jueves, en Ahigal y el viernes, en Cedillo.
“Hay ayuntamientos -ha aseverado el diputado- que no tienen capacidad ni para llevar a cabo la licitación, por eso, hasta ahora les ayudábamos con la redacción de los pliegos, pero a partir de ahora les ofrecemos hacernos cargo de la gestión, porque queremos dar la vuelta a esto, queremos hacer una revolución completa sobre la depuración de aguas”.
Estas reuniones se mantienen ahora con 24 municipios cuyas depuradoras o están recién construidas (por parte de la Junta de Extremadura o de la Confederación Hidrográfica), en periodo de pruebas o en obras de rehabilitación y reparación. No obstante, la oferta se extiende a todos los municipios de la provincia.
Algunos apuntes
La gestión de la depuración de las aguas residuales es una competencia municipal de acuerdo con lo establecido en la Ley de Bases de Régimen Local. Debido al pequeño tamaño de la gran mayoría de municipios de la provincia de Cáceres, la Diputación Provincial trabaja para ayudar en la gestión de dicho servicio de depuración de aguas residuales, apoyando técnica y económicamente a dichos municipios.
Así, la gestión conjunta de servicios municipales por parte de la Diputación de Cáceres redunda en una serie de ventajas, como son:
- Economía de escala que representa una disminución de costes globales para los servicios a gestionar.
- Control técnico de los servicios que se prestan a los ciudadanos.
- Gestión económica de los usuarios en cuanto a recaudación.
- Control de vertidos a colectores, evitando problemas en el proceso de tratamiento de las aguas.
- Control económico del servicio auditando el mismo para evitar problemas.
Los tres principales costes del servicio de depuración de aguas residuales son: de personal, de energía eléctrica y de mantenimiento. Por lo tanto, la gestión agrupada de varias instalaciones de depuración revierte en una disminución de los mismos por utilización compartida de medios materiales y humanos en las distintas instalaciones. Esto, tal como se explica desde el área de Gestión Medioambiental, es lo que se pretende hacer desde la Diputación de Cáceres, agrupando un número importante de instalaciones para poder prestar un servicio con menores costes y por tener un volumen de facturación importante.
La Diputación de Cáceres pretende, así, salvaguardar el medio ambiente gestionando las depuradoras de aguas residuales de la provincia y controlando los vertidos que realizan los municipios a los cauces receptores.
