El programa de la Diputación de Cáceres reúne a 15 artistas, que, del 1 de septiembre al 3 de octubre, realizarán sus obras en cinco municipios, impulsando el diálogo entre arte y entorno rural.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, los derechos humanos o la identidad del mundo rural son las principales fuentes de inspiración que nutren el trabajo de los quince artistas urbanos que van a participar en la quinta edición del
programa de la Diputación de Cáceres “Muro Crítico”.
Sin embargo, en esta ocasión se ha decidido centrar la temática en la lucha contra uno de los principales problemas de la España rural, que no es otro que el de la
despoblación. Así lo ha manifestado el diputado de Cultura y Deportes de la Diputación de Cáceres,
Fernando J. Grande Cano, quien ha presentado la nueva edición, acompañado del artista
Jonatan Carranza Sojo, coordinador del programa, y de los también artistas participantes
Javier Bañeza Jaikü e Isabel Flores.
Así,
del 1 de septiembre al 3 de octubre, un grupo de quince artistas urbanos de reconocida trayectoria y experiencia, diez de ellos vinculados a Extremadura y cinco procedentes de otros puntos de España, van a intervenir en cinco municipios de la provincia -
Brozas, Cañamero, Hervás, Alcuéscar y Losar de la Vera-, realizando tres murales en cada uno de ellos en tres espacios públicos, buscando la reflexión, el análisis, el debate y el diálogo entre el arte, la sensibilización y el entorno rural. Unas actuaciones con las que, además, se busca el encuentro directo entre creadores y ciudadanía.
Este año se ha apostado por un formato nuevo y con un mayor presupuesto, pasando de los 31.000 euros del pasado año a los
46.200 de la presente edición. El nuevo formato aumenta el número de artistas y murales, pero se concentran en menos pueblos, de modo que se hagan intervenciones mayores formando conjuntos con gran atractivo cultural y turístico.
De este modo, las tres intervenciones de cada municipio tendrán estilos muy diferentes, ya que se ha diseñado el equipo de artistas de tal modo que sean
distintas líneas de trabajo, una con un estilo figurativo, más cercano al realismo, otra más ligada al lengua de la ilustración, y otra con un estilo abstracto, acudiendo a lenguajes más contemporáneos.
En cuanto a la
selección de los espacios, se ha tratado de aportar un valor añadido con la elección de edificios singulares y el planteamiento de recorridos en torno a los ejes de comunicación de cada localidad, con el fin de lograr una mayor visibilidad.
Así, en Brozas, Losar de la Vera y Cañamero se interviene a lo largo de su travesía. Además, en este último municipio, uno de los murales se realizará en el Centro de Recepción de Visitantes del Geoparque Villuercas-Ibores-Jara, convirtiéndose en otro objetivo más de visita.
En Hervás y Alcuéscar se busca implementar los espacios culturales, situando las intervenciones en las Casas de Cultura y en las inmediaciones de los museos existentes. En este sentido, destaca el emplazamiento de Alcuéscar en el que las tres intervenciones se realizarán en diferentes edificios culturales que conforman una plaza, configurando así un conjunto “sin duda, de gran atractivo”. El coordinador del proyecto Joanatan Carranza Sojo ha apuntado al protagonismo y el peso que adquieren en este nuevo formato los espacios seleccionados, que ligan perfectamente con el arte, “porque somos artistas del mundo rural y así queremos que nos sientan nuestros pueblos, porque entre todos vamos a construir una provincia, una Extremadura cada vez mejor”.
Por último, Grande Cano ha destacado que este es un festival de arte urbano
“que cumple cinco años y que ya se ha convertido en un referente en Extremadura y a nivel nacional en el único que de estas características que se desarrolla íntegramente en el mundo rural”.
