El Ayuntamiento de Plasencia ha iniciado los trabajos de demolición del edificio conocido como Bar Chiquete, situado junto a la Puerta de Talavera, con el objetivo de recuperar el lienzo histórico de la muralla y mejorar el espacio urbano en uno de los accesos con mayor tránsito peatonal y rodado de la ciudad.
La intervención, realizada en coordinación con la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Extremadura, es delicada y de alta complejidad técnica, ya que las construcciones están adosadas a la muralla. “No es simplemente un derribo, es una actuación estratégica para la ciudad. Liberar este espacio nos permitirá mostrar parte del patrimonio histórico y, al mismo tiempo, mejorar la movilidad y proyectar una futura glorieta que sustituirá a los semáforos actuales”, ha explicado el alcalde, Fernando Pizarro.
Recuperación patrimonial y proyección urbana
El derribo dejará visible aproximadamente el 50% de uno de los cubos de la muralla, quedando aún pendientes otras edificaciones adosadas, que el Ayuntamiento prevé ir adquiriendo progresivamente. “Nuestro objetivo es que toda la Puerta de Talavera quede exenta de construcciones y se integre en un espacio urbano de calidad, en el que patrimonio y ciudad convivan en equilibrio”, ha señalado Pizarro.
La directora general de Patrimonio, Adela Rueda, ha resaltado que “estas actuaciones requieren precisión arqueológica, seguimiento constante y un compromiso firme con la conservación. Trabajamos para que cada elemento que aflore de la muralla se documente y se preserve, porque forma parte de la memoria y la identidad de Plasencia”.
Futuras actuaciones
El proyecto incluye la urbanización del espacio liberado, ampliando acerados y mejorando la accesibilidad en la zona. A medio plazo, la Puerta de Talavera se integrará en el nuevo diseño de movilidad que contempla la construcción de una glorieta financiada con fondos EDUSI.
El alcalde ha recordado que este derribo se enmarca en un plan más amplio de recuperación de la muralla, que incluye próximas actuaciones en el postigo de Santa María y otros puntos de la ciudad. “Estamos hablando de intervenciones que no solo rescatan elementos históricos, sino que reordenan espacios clave para el futuro de Plasencia”, ha concluido Pizarro.
